lunes, 22 de septiembre de 2008

"Ingenuo en derecho romano significa: El hombre nacido libre”

La obra de teatro “Rebeldías posibles”, de la compañía madrileña “Cuarta Pared”, nos habla de esa lucha diaria que supone enfrentarse a los propios miedos y resignaciones. No se trata de grandes proezas heroicas, simplemente consiste en plantarle cara a las pequeñas-grandes injusticias y frustraciones que hacen de nosotros seres desgraciados sin expectativas de cambio posible. El protagonista de la obra lo deja bien claro en escena: cuando se producen abusos o lucha de intereses el hombre aparentemente indefenso siempre tiene elección. La posibilidad de luchar sin tregua para conseguir que las cosas cambien o seguir sometido y bloqueado por el miedo.

En “Rebeldías posibles” recuperar la ingenuidad es recuperar la libertad y la esperanza en un mundo donde amenudo asistimos a la insolidaridad de todas aquellas personas que a su vez viven atemorizadas, asfixiadas o frustradas por el sistema. “Ingenuo” significa en derecho romano: el hombre nacido libre, es decir, aquel que consciente de sus derechos lucha por ellos para defender su integridad como persona.
En un mundo competitivo donde la ingenuidad es considerada una debilidad, los personajes de “Rebeldías posibles” se desenvuelven para intentar demostrar lo contrario. Quien no conserva la ingenuidad no alcanza la fortaleza suficiente para luchar por sus ideas y sus derechos. Una sociedad fuerte requiere de pequeñas rebeliones individuales y colectivas que son difíciles, pero también necesarias para la construcción de un mundo mejor. Tras el éxito alcanzado en su gira por 40 ciudades españolas, la compañía “Cuarta Pared” regresa a Madrid para fortuna de quienes no pudieron ver esta obra durante el verano.

domingo, 14 de septiembre de 2008

Coleccionistas de pequeños mundos

"Mira fijamente. Es la forma de educar la retina, y más. Mira fijamente, curiosea. Escucha, espía. Muere sabiendo algo. No estás aquí para siempre".
Con esta frase, el fotógrafo norteamericano Walker Evans resume la esencia de la fotografía. Así como la fugacidad, el valor del instante y el paso del tiempo. Ser fotógrafo supone ser un observador cotidiano capaz de atrapar el espíritu de una época y de un contexto determinado. Es un medio capaz de retratar formas de vida, ciudades en movimiento que cambian según el ritmo y las historias de las personas que habitan en ellas. La fundación Mapfre nos ofrece estos días en Madrid un retrato de la sociedad norteamericana entre los años 30 y 70.
A través de la mirada de fotógrafos como Diane Arbus, Gary Winogrand o Friedlander Lee, la fotografía se convierte en testimonio y testigo de vidas pasadas y nos sumerge en el pensamiento y la vida de sus protagonistas, así como de quienes supieron captar destellos de cotidianidad con su cámara.


viernes, 29 de agosto de 2008

Visita al Mont Saint Michel, en la Bretaña francesa (25-08-2008)

La masa de "peregrinos-turistas" por poco acaba con nosotras. Lo importante es que hemos sobrevivido y que a pesar de lo impresionante que resulta el Mont Saint Michel, no hemos decidido hacernos monjas. Al contrario. Queremos vivir con intensidad, arriesgar nuestra vida enfrentándonos a mareas y navegando a bordo de pesqueros... Enfin, el caso es que un lugar tan espiritual y a la vez tan turístico provoca sentimientos encontrados. Por un lado, la sensación de que algo grandioso impulsó a los hombres durante siglos a contruir una obra arquitectónica sin precedentes, llenos de fe y deseos de alcanzar la perfección. Y por otro lado, la sensación de que el capitalismo se lo traga todo, y que es capaz de buscar el negocio incluso en lo que en un principio pretendía ser un símbolo de la salvación del alma y el sosiego de los monjes benedictinos. ¿Estuvimos en una abadía o en un parque de atracciones? Me gustaría quedarme con la intención primera, con la caprichosa naturaleza que colocó un monte en medio de la nada. Eso merececía una abadía, sí señor. Es decir: un poco de espiritualidad.



domingo, 15 de junio de 2008

La cultura por un consumo responsable y sostenible

Las previsiones empiezan a convertirse en hechos, las amenazas en peligros reales y tangibles. La sensibilización hacia un consumo responsable es cada vez más necesario en un mundo superpoblado, donde los recursos naturales empiezan a escasear. Esta vez no se trata de una lucha de bandos opuestos, ni siquiera de un enemigo invisible e indefinido. El llamado “primer mundo empresarial”, el creador de la llamada “sociedad de consumo” tendrá que usar esta vez sus seductoras armas comunicativas para convencer de que hay que consumir menos y más sabiamente. No se trata de producir más , sino de encontrar la utópica formula que permita un consumo y una distribución de los recursos inteligente y responsable, que beneficie a todos. Multinacionales y gobiernos son cada vez más consciente de ello, y desde el poder se promueven “Pactos por el Agua”, la aplicación de políticas de responsabilidad social corporativa, actos culturales en pro de la concienciación colectiva e individual. Esta vez está en juego la propia supervivencia. La guerra por el agua es ya un hecho y ha empezado a provocar las primeras polémicas y conflictos. En Cataluña el trasvase del Ebro es un ejemplo. Se trata no sólo de decidir quien necesita con más urgencia los recursos, sino también un método que permita hacerlo de manera limpia, justa y equitativa. Quizás sean demasiados los retos a superar en un plazo breve de tiempo. Y es precisamente esa contrarreloj la que no permite dar tregua a que los buenos deseos se conviertan a su vez en hechos. Quizás hay algo fundamental que cambiar en la sociedad, antes de que eso sea posible.

lunes, 12 de mayo de 2008

Cuando el espectáculo está detrás del escenario

Comedia y tragedia se dan la mano estos días en el teatro Abadía, en un homenaje al arte interpretativo corporal a través de las máscaras y el mimo de los personajes de la obra “Teatro Delusio”, de la compañía “Familie Flöz”. En esta ocasión, las bambalinas se convierten en el escenario ideal para narrar simultáneamente lo visible y lo invisible en una representación teatral, a través de la música y la sutileza de la expresión corporal. La preparación del espectáculo y la recreación del sueño teatral detrás del escenario se convierten en si mismos en la esencia de la comedia. Allí donde empieza el sueño, en la parte trasera de un escenario, se esconden las aspiraciones y los deseos de quienes anhelan su parte de protagonismo en el mundo mágico de la interpretación.
El espíritu travieso del teatro es homenajeado y contagia a quienes lo viven en primera persona, a quienes lo observan desde la parte trasera del decorado y, por último, al público, que se convierte en cómplice y a su vez en protagonista activo de la obra. Quizás, parodia de la sociedad misma, donde el trabajo anónimo de unos contribuye a un resultado final cuyo reconocimiento es tan sólo para unos pocos, se nos muestran las vivencias y secretos de quienes, a pesar de las frustraciones personales, tienen la habilidad de convertir la tragedia cotidiana en comedia. El juego de las máscaras hace posible que tan sólo tres actores consigan encandilar al público mediante un desfile incesante de personajes, que no dejan tregua a la atención del espectador.

lunes, 24 de marzo de 2008

Ligabue: el rockero con alma de niño

Aunque probablemente a muchos les resulte desconocido, Luciano Ligabue representa la voz rasgada de rockero experimentado que ha pasado por muchos oficios y sacrificios en forma de "piccola estella senza cielo", antes de convertirse en todo un mito en el firmamento de la música italiana. Quizás por eso sus principales temas nos hablan de la necesidad de soñar y mantener la esperanza en un mundo demasiado rudo en donde en ocasiones es dificil hacerse mayor. Se trata de un rockero con alma de niño que se resiste a someterse a las leyes del tiempo y la realidad.
En sus videoclips y sus canciones la burla a la línea del tiempo se convierte en una constante. Seguramente porque es el principal factor opresor a la hora de tomar las principales decisiones (su tema "non è tempo per noi"), y a la vez lo que nos mantiene siempre al borde del abismo o al borde de la vida incipiente (su tema"si viene e si va").
Pero sobre todo, Ligabue nos invita a vivir el ahora, a vivir este mundo como un explorador desubicado en busca de su propio firmamento ("piccola estella senza cielo"), a sacar ese pequeño peter pan que llevamos dentro que se rebela a crecer como un adulto resignado y sin esperanza (voglio volere). Y sin duda ese es el principal secreto de su éxito, y de que nos haga vibrar al son de las guitarras eléctricas y de la fuerza de su voz. El próximo 9 y 11 de abril tocará en Madrid y en Barcelona respectivamente.
Aquí os paso un link para los que quieran escuchar uno de sus mejores temas: http://es.youtube.com/watch?v=cVTp58gUPDk&feature=related

miércoles, 19 de marzo de 2008

La búsqueda de Siddhartha

.."Encontramos consuelos, conseguimos insensibilizarnos y aprendemos artificios para engañarnos. Pero no hallamos lo Esencial, el Camino de los caminos." (Siddhartha)

"La verdadera profesión del hombre es encontrar el camino hacia si mismo". (Hermann Hesse)



martes, 15 de enero de 2008

La invención del relato o el síndrome de Scarlett O'Hara

Cuando tus vivencias y sus protagonistas se empiezan a convertir en un recuerdo lejano empiezas a preguntarte el grado de autenticidad de lo recordado. Sin embargo, Gabriel García Márquez ya lo dijo en su día: "La vida no es la que uno vivió, sino la que uno recuerda", y eso prevalece por encima de cualquier hecho objetivo. Es la llamada "verdad de cada uno", esa que dificilmente es transferible a los demás. El filtro subjetivo vital constituido de emociones, expectativas y valoración de los hechos se nutre cada día, se va transformando y evoluciona según nuestro entorno y como lo percibimos.

Scarlett O'Hara en la película "Lo que el viento se llevó" levantó el puño en alto cuando vió convertida en cenizas tras la guerra la idílica tierra que ella recordaba. Ese mítico puño en alto vendría a ser la impotencia que nos provoca la caída de nuestros mitos, de nuestros relatos personales idealizados y solidamente construidos a través del tiempo. El relato surje entonces como una manera de querer compartir conocimiento y experiencias, en un intento por transcender en la realidad ajena y superar la barrera infranqueable del otro, o bien satisfacer de esta manera nuestro instinto vital de perpetuación o supervivencia, a través de la preservacion de nuestro mundo personal idealizado.
Por lo tanto, no sería descabellado asegurar que nuestro ego y la voluntad de sentirnos menos solos nos impulsa a escribir y a adoptar cualquier forma creativa de expresión para transmitir nuestra visión de la realidad, para denunciar o ensalzar aquello que nuestra sensibilidad es capaz de sustraer o contemplar, dotándolo de autenticidad para nosotros mismos.
Los primeros contadores de historias consiguieron provocar fascinación entre los que supieron y quisieron empaparse de otras vidas. A través de la imaginación eran capaces de transportar a sus oyentes a países lejanos, hacer creer en leyendas y fantasear con hadas, ninfas y duendes. En cada fantasía siempre hubo mucho de moraleja y de realidad para los que supieron ver más allá de lo narrado. Los libros, los teatros y los contadores de historias han sido desde el inicio de los tiempos una escapada mental, convirtiendo la fantasía del relato en un arma por y para la libertad, capaz de romper canones y defender la subjetividad del relato como un derecho inherente al ser humano.
La subjetividad y la fantasía siempre fueron peligrosos y mirados con recelo por la censura y lo politicamente correcto. Pero lo cierto es que más allá de que la fantasía se use de muy diversas formas, ya sea para llenar los bolsillos de algún bienaventurado escritor que supo llegar a los demás a través de sus historias, o para colar verdades personales medio encubiertas entre las páginas de algún libro, nos gusta creer más en el personaje que en la persona. Y esa es la verdadera clave para que siga triunfando esa mentira agri-dulce, siempre más romántica, dramática o verdadera que la propia realidad.

jueves, 10 de enero de 2008

El Tren


Se puede estar dormido,
Flotando entre los pasajeros
Que han perdido su camino.
El mundo queda atrás,
Y la noche espesa
recubre con su manto
Sueños y esperanzas.

Ideales dormidos y olvidados,
Que van y vienen por las vías,
Caminos a medio hacer.
Bálsamo para los sentidos
En un sueño sin sueños,
Identidades futuras y pasadas…
En un mismo tren confluyen almas encadenadas
Que nunca llegan a encontrarse.

Virginia.

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